Tal vez el problema principal del proyecto de Ley de Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal, que acaba de presentar el gobierno al Congreso, es la consideración de los bosques naturales como una sola unidad. Esto significa desconocer que, de acuerdo a sus fines prioritarios, hay tres categorías diferentes, cada una de las cuales exige distintas lógicas de acción y marcos legales específicos: bosques de preservación, bosques de protección y de producción. La gran equivocación de la propuesta de ley es que intenta responder a la demanda ciudadana de conservación de la vida silvestre y la identidad paisajística, con la herramienta equivocada: restricciones en los bosques de producción. Un modo de reorientar esta propuesta sería partir por reconocer la existencia de las tres categorías propuestas, diseñar programas de forestación con especies de rápido crecimiento específicamente orientados a satisfacer la demanda por leña, y completar el Sistema Nacional de Areas Silvestres Protegidas del Estado, SNASPE, para asumir por esa vía la fuerte demanda por la conservación del bosque nativo Ambiente y Desarrollo ; 3,Vol. 8 Idioma: Español ISSN/ISBN 7161476
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Ambiente y Desarrollo ; 2,3,4,18 Séptimo Encuentro Científico sobre el Medio Ambiente, Antofagasta, mayo 2002 ISSN/ISBN 7161476
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La Guía para el Uso de Modelos de Aguas Subterráneas en el SEIA fue elaborada por el Servicio deEvaluación Ambiental (SEA), proceso liderado por la División de Evaluación Ambiental y ParticipaciónCiudadana, con la colaboración de la División Jurídica. 9789569076121
La Guía fue elaborada por el Servicio deEvaluación Ambiental (SEA), proceso liderado por la División de Evaluación Ambiental y ParticipaciónCiudadana, con la colaboración de la División Jurídica. 9789569076176
EnlaceSi bien el Sistema del Tratado Antártico (STA) ha transitado por una preocupación ambiental creciente, luego de 30 años aún no había dado origen a un sistema de protección ambiental adecuado. El punto más alto de conflicto entre los usos económicos y la conservación del ambiente antártico, ha sido el debate sobre la eventual utilización de recursos minerales, particularmente petróleo. Desde la reunión de París (1989) a la de Madrid (1991), el debate ha ido progresivamente moviéndose hacia posiciones más conservacionistas Ambiente y Desarrollo 2, vol. 7 Idioma: EspañolIncluye notas a pie de página ISSN/ISBN 7161476